La inclusión laboral desempeña un papel fundamental en el proceso de recuperación y estabilidad. En este post, exploraremos cómo la inserción laboral se convierte en una gran herramienta para lograr una inclusión real en salud mental y los beneficios que conlleva tanto para los individuos como para la sociedad en su conjunto.
1. Redefiniendo la identidad y la autoestima:
La inserción laboral brinda a las personas con diferentes casuísticas en salud mental la oportunidad de redefinir su identidad más allá de su condición de salud. Proporciona un sentido de propósito y logro que puede elevar la autoestima y la confianza en sí mismos. Al ver que son capaces de contribuir de manera valiosa en un entorno laboral, pueden empezar a verse a sí mismos como lo que son, individuos capaces y competentes.
2. Fomento de la independencia:
El empleo proporciona independencia económica, lo que puede reducir la dependencia de sistemas de apoyo. Esto contribuye a un mayor sentido de autonomía y control sobre sus vidas, lo que puede ser especialmente liberador para aquellos que previamente se sentían limitados por su dependencia de otros.
3. Construcción de relaciones sociales:
El trabajo es un entorno propicio para establecer relaciones sociales. Al interactuar con compañeros de trabajo de manera regular, desarrollando así conexiones significativas. Estas relaciones no solo brindan apoyo emocional, sino que también combaten el aislamiento social, un problema común entre quienes enfrentan desafíos de salud mental.
4. Vida activa y rutina:
La rutina y la vida activa son elementos esenciales para mantener la estabilidad emocional, especialmente para personas que conviven con trastornos como la depresión o la ansiedad. El empleo proporciona una rutina diaria que incluye horarios de trabajo, responsabilidades y tareas específicas, implica tener una vida activa, tan necesaria para la recuperación y el mantenimiento.
5. Reducción de estigma:
El éxito en la inserción laboral desafía los estereotipos y reduce el estigma que rodea la Salud Mental. Demuestra que todos tienen habilidades valiosas para ofrecer y que un diagnóstico de salud mental no debe ser una barrera insuperable para el empleo. Esto puede contribuir a una mayor aceptación y comprensión de la salud mental en la sociedad en general.
6. Sentido de propósito:
El empleo proporciona un sentido de propósito y contribución a la sociedad. Saber que se está contribuyendo de manera significativa, ya sea en un trabajo remunerado o en una posición de voluntariado, puede mejorar la salud mental y el bienestar emocional. Tener un propósito en la vida puede nos ayuda a superar obstáculos y mantenernos en el camino.
La inserción laboral es una herramienta poderosa para lograr una inclusión real en salud mental. Los beneficios no solo impactan a nivel individual, sino que también se extienden a la sociedad en su conjunto. Al proporcionar oportunidades laborales, apoyo y comprensión, podemos ayudar a las personas que atendemos a construir vidas más saludables y significativas, rompiendo estigmas y construyendo una sociedad más inclusiva y compasiva. La inserción laboral no solo es una cuestión de empleo; es una cuestión de dignidad, autonomía y esperanza.